lunes, 11 de abril de 2011

Diferentes "tipos" de universitarios.

El otro día, a las diez y media, un Ingeniero-Filósofo-Psicólogo-Pesao hablando sobre obsolescencia programada en el Programa Estado de Gracia de Radio Alcores. Lenguaje técnico y científico, fluido y entendible quizás, pero cuando acabó me quedé con la sensación de , "vale, sabes mucho y todo lo que has contado es muy interesante, pero fuera de la universidad todo lo que has comentado es papel mojado".

Para entendernos, la Universidad Española es un desastre, si un desastre, está llena de profesores que desde sus pedestales no bajan a la realidad y explican coplas que se las saben de memoria sin salirse del guión, ya que como los saque de ahí...
Después, universitarios españoles con su carrera acabada no son capaces de dar una clase si no van un año a la academia, no son capaces de defender un delincuente sin hacer su practica en el colegio de abogados o van a una obra y confunden una viga con un pilar porque en toda la carrera no se han manchado los zapatos de cemento.

La Universidad debe ser formadora y práctica, para que una vez fuera de ella, seas capaz de aplicar tu conocimiento a la realidad que te rodea. Eso en España no pasa por el simple hecho de que los que están en los pedestales, no conocen la realidad. Hay gente que se saca la carrera sin ir a clase en los cinco, seis o siete años y sin hacer ni una sola práctica, ¿Se fiaríais de un médico que se sabe el libro de memoria pero no ha hecho ninguna práctica y no ha pisado la facultad?...
A la vez, tiene que dar capacidad para mejorar el entorno, es decir, para innovar. Pero claro,un tio que lleva con su culo sentado en la misma silla veinte años sin que nadie le replique, pues como que ya ni se acuerda como mejorar o modificar cosas, porque simplemente no le conviene.
Pues por ese hecho, si no da profesionales "terminados" y personas que no le enseñan a innovar, la Universidad española es un fracaso. Y es culpa de todos, de todos los políticos por no cambiar las leyes, de los universitarios por no quejarse y de la sociedad por su pasividad.

Ahora vamos a cambiar un poco de tema con tres palabras, Google, Facebook y Apple.
Las tres empresas más conocidas, con más crecimiento y con más poder del Mundo, y con historias muy parecidas. Ahí va un breve resumen de las tres:
- Google: fundada en EEUU en 1998 por Larry Page y Sergey Brin, dos UNIVERSITARIOS de Stanford que durante sus estudios de Post-grado, con ayuda de Hector García Molina, crearon un Motor de Búsqueda aplicando sus conocimientos matématicos.




- Facebook: Red Social creada por Mark Zuckeberg para que universitarios de Harvard se comunicaran. Es decir, un UNIVERSITARIO para UNIVERSITARIOS.

- Apple: Steve Jobs y Steve Wozniak fundaron la empresa, ya que eran amantes de la electrónica. Ambos eran UNIVERSITARIOS.

Es decir, que mientras en España no se en que se piensa, allí piensan en hacer negocio y ganar dinero y encima con cosas que les encantan, vamos, igualito que aquí.

Y, ¿Por qué pasa eso? pues porque desde la misma universidad y desde la misma sociedad se impulsa de forma directa éste tipo de actividades.
Aquí el sueño es ser funcionario, debido por el agravio comparativo gravísimo entre un trabajador y un funcionario, y allí en ser empresarios.

Al final al cabo, los empresarios son los que crean empleo.
Y, ¿Qué hace falta en España?

Como me dijeron a mi una vez, al final la economía es sólo psicología y lo mejor para ésta región es que de una vez se cambie la mentalidad y se de paso a una sociedad más compleja y menos simplistas de las cosas.

Fdo. Antonio Carlos Moreno Falcón.
Amante de la buena mesa.

P.D. Si me dan a elegir entre ser funcionario o una quiniela, me lo pensaría muy mucho. El agravio comparativo es demasiado grande, vacaciones, calidad de vida, presión y que no te echan a no ser que el presidente del gobierno firme personalmente.
P.D. Hay honrosas excepciones en cuanto al profesorado, pero los acomodados son demasiados.
P.D. Desgraciadamente, hay todavia empresas que no utilizan ni el correo electrónico. Así no podemos competir, y menos quejarnos. 

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